"Hay cuentos para cada momento,
cuentos para cada estación:
los cálidos cuentos para el largo invierno,
cuentos azules, rojos, verdes y violetas para la primavera,
el verano trae adivinanzas, bromas y chistes
y las grandes epopeyas se cuentan en otoño.
Pero aqui y ahora,
en aquel trópico, atravesado por el dolor y la pasión,
la tradición quiere que cuente
los cuentos del amor.
Los Cuentos del Espíritu... para pensar y para amar mejor..".

Nicolás Buenaventura Vidal, in espectáculo "Cuentos del Espíritu", Festival Internacional de Teatro de Almada (Portugal, Julho, 2007).


Si quieres un adulto con pensamiento creativo, de pequeño cuéntale cuentos. Si lo quieres, además sabio, cuéntale más cuentos. Albert Eisnstein

domingo, 31 de mayo de 2009

LA RIQUEZA



Un padre económicamente acomodado, queriendo que su hijo valorara lo que tenía y supiera lo que es ser pobre, lo llevó para que pasara un par de días en el monte con una familia campesina amiga.

Pasaron tres días y dos noches en su vivienda del campo. En el carro, retornando a la ciudad, el padre preguntó a su hijo:

-¿Qué te pareció la experiencia?...

-Buena, contestó el hijo con la mirada puesta a la distancia.

- Y... ¿qué aprendiste?, insistió el padre...

El hijo contestó: Varias cosas:

1. Que nosotros tenemos un perro y ellos tienen cuatro.

2. Nosotros tenemos una piscina con agua estancada que llega a la mitad del jardín... y ellos tienen un río sin fin, de agua cristalina, donde hay pececitos y otras bellezas.

3. Que nosotros compramos faroles costosos para alumbrar nuestro jardín... mientras que ellos se alumbran con las estrellas y la luna.


4. Nuestro patio llega hasta la cerca...y el de ellos llega al horizonte.

5. Que nosotros compramos nuestra comida; ...ellos, siembran y cosechan la suya.

6. Nosotros oímos CDs... Ellos escuchan una constante sinfonía de pajaritos, pericos, ranas, sapos, grillos y otros animalitos....

7. Nosotros cocinamos en estufa eléctrica... Ellos, todo lo que comen tiene el precioso sabor del fogón de leña.

8. Para protegernos nosotros vivimos rodeados por un muro, con alarmas.... Ellos viven con sus puertas abiertas, protegidos por la amistad de sus vecinos.

9. Nosotros vivimos conectados al celular, a la computadora, al televisor... Ellos, en cambio, están conectados a la vida, al cielo, al sol, al agua, al verde del monte, a los animales, a sus siembras, a su familia.

El padre quedó impactado por la profundidad de los pensamientos de su hijo. Entonces el joven terminó:

- ¡Gracias papá, por haberme enseñado lo pobres que somos!

Cada día estamos mas pobres de espíritu y de apreciación por la naturaleza.

Nos preocupamos por TENER, en vez de preocuparnos por SER.

sábado, 2 de mayo de 2009

LA CODICIA

Cavando, para montar un cerco que separara mi terreno de el de mi vecino, me encontré enterrado en mi jardín, un viejo cofre lleno de monedas de oro.
A mi no me interesó por la riqueza, me interesó por lo extraño del hallazgo, nunca he sido ambicioso y no me importan demasiado los bienes materiales, pero igual desenterré el cofre.
Saqué las monedas y las lustré. Estaban tan sucias las pobres...
Mientras las apilaba sobre mi mesa prolijamente, las fui contando...
Constituían en sí mismas una verdadera fortuna. Solo por pasar el tiempo, empecé a imaginar todas las cosas que se podrían comprar con ellas.
Pensaba en lo loco que se pondría un codicioso que se topara con semejante tesoro. Por suerte, por suerte...no era mi caso...
Hoy vino un señor a reclamar las monedas, era mi vecino. Pretendía sostener en un miserable que las monedas las había enterrado su abuelo, y que por lo tanto le pertenecían a él.
Me dio tanto fastidio que lo maté...
Si no lo hubiera visto tan desesperado por tenerlas, se las hubiera dado, porque si hay algo que a mí no me importa son las cosas que se compran con dinero, eso sí, no soporto la gente codiciosa...


JORGE BUCAY