"Hay cuentos para cada momento,
cuentos para cada estación:
los cálidos cuentos para el largo invierno,
cuentos azules, rojos, verdes y violetas para la primavera,
el verano trae adivinanzas, bromas y chistes
y las grandes epopeyas se cuentan en otoño.
Pero aqui y ahora,
en aquel trópico, atravesado por el dolor y la pasión,
la tradición quiere que cuente
los cuentos del amor.
Los Cuentos del Espíritu... para pensar y para amar mejor..".

Nicolás Buenaventura Vidal, in espectáculo "Cuentos del Espíritu", Festival Internacional de Teatro de Almada (Portugal, Julho, 2007).


Si quieres un adulto con pensamiento creativo, de pequeño cuéntale cuentos. Si lo quieres, además sabio, cuéntale más cuentos. Albert Eisnstein

sábado, 6 de septiembre de 2008

¿SE PUEDE ARREGLAR EL MUNDO?



Un científico que vivía preocupado con los problemas del mundo estaba resuelto a encontrar los medios para aminorarlos.Pasaba días en su laboratorio en busca de respuestas para sus dudas. Cierto día su hijo de 7 ańos invadió su santuario decidido a ayudarlo a trabajar.El científico nervioso por la interrupción le pidió al nińo que fuese a jugar a otro lado.Viendo que era imposible sacarlo, el padre pensó en algo que pudiese darle con el objetivo de distraer su atención.De repente se encontró con una revista en donde había un mapa con el mundo, justo lo que precisaba. Con unas tijeras recortó el mapa en varios pedazos y junto con un rollo de cinta se lo entregó a su hijo diciendo: como te gustan los rompecabezas te voy a dar el mundo todo roto para que lo repares sin ayuda de nadie.Entonces calculó que al pequeńo le llevaría 10 días componer el mapa, pero no fue así. Pasadas algunas horas escuchó la voz del nińo que lo llamaba calmadamente. Papá, papá, ya hice todo, conseguí terminarlo. Al principio el padre no creyó en el nińo. Pensó que sería imposible que a su edad hubiera conseguido recomponer un mapa que jamás había visto antes.Desconfiado el científico levantó la vista de sus anotaciones con la certeza de que vería el trabajo digno de un nińo.Para su sorpresa el mapa estaba completo. Todos los pedazos habían sido colocados en sus debidos lugares. Cómo era posible? Cómo el nińo había sido capaz de hacerlo? De esta manera el padre preguntó con asombro a su hijo- Hijito tú no sabías cómo era el mundo cómo lo lograste?Papá respondió el nińo, yo no sabía como era el mundo, pero cuando sacaste el mapa de la revista para recortarlo vi que del otro lado estaba la figura de un hombre. Así que di vuelta los recortes y comencé a recomponer al hombre que sí sabía como era. Cuando conseguí arreglar al hombre, di vuelta la hoja y vi que había arreglado al mundo.
Gabriel García Márquez

1 comentario:

tanci dijo...

Lo había leído, pero no sabía que era de García Márquez. Empecemos a arreglar a las personas, tal vez salvemos el mundo.Gracias por recordármelo.